La Parroquia Ntra. Sra. de América Latina, dedica salón de actividades al padre José Manuel Madruga del Instituto Español de Misiones Extranneras (IEME)

Sabana Perdida, Santo Domingo Norte

La primera Eucaristía de este domingo estuvo presidida por Su Excelencia Reverendísima Monseñor Jesús Castro Marte, Obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santo Domingo, quién indicó que cuando el Señor llama, respalda.

Explicó que pueden que algunas personas “te hagan la guerra”, pero Dios siempre está para sus hijos.

"El Señor nos llama y nos protege", expresó durante la homilía.

Castro Marte afirmó que los cristianos deben cumplir con  la voluntad de Dios.

Asimismo, el obispo dijo que a comunidad católica debe saber que el profeta tiene una misión, que es anunciar y denunciar, pero cuando este es conformista pierde el sentido.

Añadió que en los pueblos siempre surgen nuevos profetas y cada uno está llamado a hacerlo y que los mismos ayudan generalmente a los que necesitan más de Dios.

Sobre el Evangelio de hoy, explicó que Jesucristo desde el principio pone claro cuál es su misión.

Su Excelencia Reverendísima enfatizó en que el amor en la vida es lo esencial, un amor sin límites que no tiene categoría, ni razas.

“El amor es abierto totalmente a los demás  y es la misión del profeta”, sostuvo.

Por otro lado, Castro Marte felicitó a los dos sacerdotes de la parroquia, al reverendo Padre José Alberto Vargas, párroco de la iglesia y al reverendo Padre Domingo Vásquez, vicario.

Además dio una felicitación a todo el equipo por el crecimiento de la comunidad.

"Poco a poco se va construyendo esta comunidad, trabajando en equipo", dijo.

Exhortó su apoyo total al Padre José Alberto Vargas, e invitó a la comunidad a valorarlo y a orar por ambos sacerdotes.

"Decir que cuenta con nosotros, conmigo como Obispo, estoy muy contento con el trabajo que está haciendo en la parroquia, tiene mi apoyo total, no parcial, total", puntualizó.

De su lado Vargas agradeció a Castro Marte por siempre brindarle un apoyo incondicional.

Al impartir la bendición del salón, monseñor Jesús Castro Marte indicó que el sacerdote Madruga debe estar feliz en el cielo, mirando que colocaron su nombre a un salón para formar a muchas personas como él también lo hacía
Exhortó a los usuarios del salón a cuidarlo y agradeció a Polanco y Lizardo por sus aportes a la comunidad y en Santo Domingo Norte y s Santana por su ayuda a la comunidad educativa.
En la actividad, la hermana en Cristo Plácida Rodríguez, dio su testimonio del trabajo realizado por Madruga. Dijo que el sacerdote ayudó a las personas a formarse, con talleres y misas, haciendo énfasis con los sacramentos.
También, se leyó una reseña bibliografía del Padre Madruga, a cargo de Roberto De la Cruz.
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