No tengo porque sentir temor al aventurarme de Tu mano, ni aún cuando el panorama se vea nublado y oscuro. Dame Tu Santo Espíritu para que pueda mirar la luz siempre en mi porvenir y la alegría de que cuento contigo.
Quiero aprender a vivir un día a la vez porque Tú me das la fortaleza suficiente para llevar sobre mis hombros las cargas diarias. Soy Tu hijo agradecido y siempre quiero estar agradecido.
Fortalece mi corazón para que siempre viva en Tu presencia y reciba vida de Tu palabra y Tus promesas.
Mi Jesús de Nazareth, escúchanos y bendícenos. Te susurro en el oído: "Recuerda que toda mi esperanza esta puesta en Ti”. María Milagrosa abrázame fuerte porque te amo y te necesito. Amén.
Muy buenas noches. La Paz de Dios sea siempre contigo. Oro por ti y te pido me encomiende en sus oraciones.
Tarea: orar por los presos y por los enfermos.✍
VIVIENDO UN BUEN ADVIENTO
PARA UNA FELIZ NAVIDAD”
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