ORACIÓN DE LA NOCHE

Señor mío y Dios mío, en esta noche en la que todo me habla de tu inmensidad, vengo ante Ti, humillado reconociendo que soy débil, que soy pecador y que me alejé de Ti, porque no amé a mis hermanos de la forma en que Tú me has enseñado, pero yo se que tu misericordia es nueva cada día, porque sé lo mucho que me quieres, me atrevo a dirigirme a Ti, a mostrarme ante tu presencia, lleno de respeto hacia Ti. Yo reconozco tu inmenso poder y reconozco mi pequeñez ante tu majestad, por tu amor no me dejes, no me desampares nunca, que nada me arrebate de tus manos y que nada me aparte de tu cálida mirada, Regalame una noche en paz, por la certeza de tu presencia en mi vida, que en el día de mañana Yo pueda repetir esas palabras hermosas que Tú, Jesús, nos enseñaste: que se haga tu voluntad en la tierra así como en el cielo. Dios mío, yo sé que cuándo te busco no quedó defraudado, es más, Tú no defraudas a nadie, das más de lo que uno te pide.

AMÉN.

P. Alberto Linero Gómez✍

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