Padre Manuel Antonio García Salcedo PhD. Arquidiócesis de Santo Domingo*
En los documentos del Concilio se nombra al Espíritu Santo 258 veces, dato que manifiesta la tendencia propia de la Pneumatología que procura la conexión con todos los tratados de Teología entre sí mediante la profundización en la doctrina sobre el Espíritu Santo como «inspiración vital» de la vida misma de la Iglesia, y en cada creyente, buscando siempre el sano equilibrio en la relaciones con la autoridad jerárquica necesaria, y suscitada por el mismo Espíritu, y el conocimiento del saber teológico en la línea de la Nueva Evangelización, que lleve al ecumenismo y al dialogo con las religiones universales, fomentando los valores comunes a toda persona humana, siempre bajo la guía del Magisterio Eclesiástico.
Nos toca adentrarnos en el Concilio Vaticano II en la búsqueda de la Iglesia puesta al día con la fe de siempre por una hermenéutica correcta para el compromiso social actual.
La Historia de la Iglesia, una vida de 21 siglos, verdadero milagro de Dios tras grandes momentos de gloria y superando muchas caídas, busca responder como Iglesia fiel al propósito por el cual, desde el Altar de la Cruz, Cristo Jesús la funda, y entrega a su Madre Virgen al Discípulo Amado para alimentarlo con el fruto eucarístico del costado abierto de la Gracia de Dios.
El objetivo del descubrir la actuación de Dios en nuestra propia historia es corregir los errores del presente, y profundizar, cimentándose en las inagotables riquezas de la Tradición Apostólica.
Por todo ello, abordaremos la historia, los contenidos y las repercusiones del Concilio Vaticano II para una renovación eclesial y social según el Magisterio Eclesiástico.
Remontarse a los inicios del Vaticano II, recorrer todo el camino de sus protagonistas, desde la fase preparatoria al desarrollo, hasta los años tumultuosos, encendidosdel post-concilio.
Recuperar los textos, uno por uno, estudiándolos en su génesis, y siguiéndolos en su desarrollo temático y en su aplicación concreta.
Conocerlos en su espíritu auténtico para tener un redescubrimiento más hondo de la naturaleza y misión de Iglesia por ese aggiornamento querido por Juan XXIII para discernir la gran Tradición Eclesiástica.
San Pablo VI explicó los fines del Concilio en los siguientes términos por: “El conocimiento o, si se prefiere de otro modo, la conciencia de la Iglesia, su reforma, la reconstrucción de la unidad de todos los cristianos y el coloquio de la Iglesia con el mundo contemporáneo” (14 de septiembre de 1963).
Al final del Vaticano II, 8 de diciembre de 1965, el Concilio de los 2500 Padres había emitido 16 documentos con enseñanzas que tocaron un rango amplio de temas, incluyendo:
+ La Liturgia (SC),
+ Los Medios de Comunicación (IM),
+ La Naturaleza de la Iglesia (LG),
+ El Ecumenismo (UR),
+ Las Iglesias Orientales Católicas (OE),
+ El Oficio de los Obispos (CD),
+ La Renovación de la Vida Religiosa (PC),
+ La Educación Cristiana (GE),
+ El Apostolado de los Seglares (AA),
+ La Libertad Humana Religiosa (DH),
+ Las Religiones No Cristianas (NA),
+ La actividad misionera (AG),
+ El ministerio y la vida de los Presbíteros (PO),
+ La Formación de los Candidatos a las Órdenes Sagradas (OT),
+ La Divina Revelación (DV)
+ La Iglesia en el Mundo Moderno (GS).
Se ha dado comienzo a una nueva era conciliar en la Historia de la Iglesia con temática positiva que requiere una síntesis no sin sufrimiento.
No hay síntesis sin cruz.
La fórmula conciliar de los dos mil quinientos Padres al fin va logrando el equilibrio difícil y necesario.
Hubo pérdidas en los años post-conciliares, pero la mayor parte de ellos ha sido de grandes beneficios.
Bajo la guía de los obispados de toda la Iglesia se promueve una liturgia fundada sobre la Palabra y sobre el Sacramento del misterio esencial de la vida divina comunicada y de la encarnación redentora que el Sacrificio de la Misa aplica y continúa, superando la visión de la reforma protestante que negaba el sacerdocio ministerial, y aquella de contra-reforma que relegó la tarea misionera a presbíteros y religiosos.
(Tesis Doctoral)
«El Diálogo Pneumatológico del Magisterio del Papa San Pablo VI a partir del Concilio Ecuménico Vaticano II».
Extracto 3.
En preparación: investigación postgrado doctoral.
*Doctor en Teología Católica
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