Núñez Collado pide un auténtico diálogo
Núñez Collado espera que el Presidente no sea indiferene ante la situación que vive el país. Maglio Pérez
SANTO DOMINGO, R.D.-. Monseñor Agripino Núñez Collado, rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) y presidente del Consejo Económico y Social (CES), considera que la situación actual que viven los dominicanos es preocupante y aboga porque desde el Gobierno se mande un mensaje de esperanza.
Advierte que la sensación que prevalece en todos los sectores sociales, en especial la clase media, es que están golpeados, que los salarios pierden cada vez más valor, debido al proceso inflacionario soterrado que sufre el país.
Refiere además el desempleo, la ola de robos, los constantes asesinatos de mujeres en medio de la violencia intrafamiliar, y lo que considera el peor de los males, la sensación de la gente de que no ve una salida, "como si los problemas no tuvieran solución".
"Hay un sector que tiene un pesimismo, con fundamento, por lo que está viviendo, pero aquí hay una cosa positiva y es que este es un pueblo bueno, y la mayoría de los dominicanos no buscan el desorden ni la protesta como protesta, y quizás eso pone una especie de muro de contención para que no haya un desbordamiento, porque disgusto hay".
Ante tal situación Núñez Collado ve la necesidad de un auténtico diálogo con todo el liderazgo nacional, para sentarse a pensar en el país.
Monseñor, invitado del Diálogo Libre, que produce el Grupo Omnimedia, bajo la conducción del director de Diario Libre, Adriano Miguel Tejada, entiende que el tiempo amerita que se haga un alto en el camino, y que haya mucho sentido de desprendimiento y de generosidad entre los sectores sociales, políticos, empresariales y religiosos, para que se pongan al servicio del país los mejores pensamientos y esfuerzos para salir de la crisis.
"Yo espero que el Presidente, que ha demostrado que es un hombre de diálogo... no va a ser indiferente a la situación y no esperará que se agrave, sobre todo este ambiente que siente la gente como de orfandad, que es malo, no es bueno".
La aprobación del Código Civil que legaliza los matrimonios de iglesias protestantes, es una gran responsabilidad para las autoridades, que deben cuidar que la forma en que se realizan las uniones no se convierta en algo que les quite dignidad.
La preocupación de Núñez Collado se basa en que, según dice, hay muchas sectas en las que una persona toma una Biblia, alquila una casa y la convierte en iglesia, lo que pone en riesgo la permanencia de los documentos que avalen un matrimonio.
La situación de los bachilleres del país es penosa, a decir de Núñez Collado, y sus faltas se sienten más en las áreas fundamentales, como español y matemáticas.
Eso ha obligado al también rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), a instaurar cursos intermedios de verano para los estudiantes, sobre todo los de escuela pública, que llegan a esa universidad.
"Aquí la escuela pública da pena, y mientras más necesidades hay en los barrios y los lugares apartados, parece que menos importancia tiene el que los niños puedan preparase adecuadamente", comenta.
Entiende que el gran reto del país es garantizar una educación que abra caminos, más allá de las universidades.
Considera que hay que mejorar la calidad de la educación, empezando por mejorar la calidad de vida y salarial de los maestros, e importar algunos, si es necesario, de áreas distintas o de otros países.
Advierte que la sensación que prevalece en todos los sectores sociales, en especial la clase media, es que están golpeados, que los salarios pierden cada vez más valor, debido al proceso inflacionario soterrado que sufre el país.
Refiere además el desempleo, la ola de robos, los constantes asesinatos de mujeres en medio de la violencia intrafamiliar, y lo que considera el peor de los males, la sensación de la gente de que no ve una salida, "como si los problemas no tuvieran solución".
"Hay un sector que tiene un pesimismo, con fundamento, por lo que está viviendo, pero aquí hay una cosa positiva y es que este es un pueblo bueno, y la mayoría de los dominicanos no buscan el desorden ni la protesta como protesta, y quizás eso pone una especie de muro de contención para que no haya un desbordamiento, porque disgusto hay".
Ante tal situación Núñez Collado ve la necesidad de un auténtico diálogo con todo el liderazgo nacional, para sentarse a pensar en el país.
Monseñor, invitado del Diálogo Libre, que produce el Grupo Omnimedia, bajo la conducción del director de Diario Libre, Adriano Miguel Tejada, entiende que el tiempo amerita que se haga un alto en el camino, y que haya mucho sentido de desprendimiento y de generosidad entre los sectores sociales, políticos, empresariales y religiosos, para que se pongan al servicio del país los mejores pensamientos y esfuerzos para salir de la crisis.
"Yo espero que el Presidente, que ha demostrado que es un hombre de diálogo... no va a ser indiferente a la situación y no esperará que se agrave, sobre todo este ambiente que siente la gente como de orfandad, que es malo, no es bueno".
Celebración de matrimonios
Pide preservarles dignidad
La aprobación del Código Civil que legaliza los matrimonios de iglesias protestantes, es una gran responsabilidad para las autoridades, que deben cuidar que la forma en que se realizan las uniones no se convierta en algo que les quite dignidad.
La preocupación de Núñez Collado se basa en que, según dice, hay muchas sectas en las que una persona toma una Biblia, alquila una casa y la convierte en iglesia, lo que pone en riesgo la permanencia de los documentos que avalen un matrimonio.
Califica de "penosa" la calidad de bachilleres
La situación de los bachilleres del país es penosa, a decir de Núñez Collado, y sus faltas se sienten más en las áreas fundamentales, como español y matemáticas.
Eso ha obligado al también rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), a instaurar cursos intermedios de verano para los estudiantes, sobre todo los de escuela pública, que llegan a esa universidad.
"Aquí la escuela pública da pena, y mientras más necesidades hay en los barrios y los lugares apartados, parece que menos importancia tiene el que los niños puedan preparase adecuadamente", comenta.
Entiende que el gran reto del país es garantizar una educación que abra caminos, más allá de las universidades.
Considera que hay que mejorar la calidad de la educación, empezando por mejorar la calidad de vida y salarial de los maestros, e importar algunos, si es necesario, de áreas distintas o de otros países.
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